“No mira los libros, ni siquiera sus títulos. Piensa: libros para gente que no lee. Piensa: libros para gente que acaba de perder a su padre y que ya había perdido a su madre, gente sola en el mundo. Libros para gente que ha fracasado en la universidad, en el trabajo, en el amor (eso piensa: en el amor). Libros para gente que ha fracasado tanto como para que a los cuarenta años cuidar la casa de otro a cambio de nada o de casi nada sea una buena perspectiva”